La residencia especializada en personas mayores LGTBIQ+ se inaugurará próximamente en Madrid y será la primera de carácter público en el mundo.

Se estima que el 67 % de las personas del colectivo llega a la edad de jubilación en situación de pobreza, por lo que será una residencia concertada.

“Somos de una generación en la que no se nos permitía trabajar, donde nos metían en la cárcel y no podíamos cotizar a la Seguridad Social. O nos dedicábamos a la farándula y no cotizaban por nosotros. Tampoco te queda pensión de viudedad. Todos los que murieron por el VIH… fueron matrimonios realmente. Pero no podíamos ser ni pareja de hecho. Les hemos cuidado y acompañado a morir pero no hemos podido pedir pensión de viudedad”, explicó el activista Federico Armenteros en una entrevista para el programa Espejo Público de la cadena Antena 3.

Bajo la dictadura franquista (1939-1975), la homosexualidad era ilegal y muchas personas LGTBIQ+ fueron encarceladas, ya que las leyes contra la “actividad homosexual” se aplicaban de manera estricta. En 1954, la reforma de la Ley de Vagos y Maleantes criminalizó aún más la homosexualidad, equiparándola con la prostitución y permitiendo el arresto de personas LGTBIQ+ bajo una ley que originalmente estaba diseñada para combatir la indigencia y la delincuencia.⁠

No fue hasta 1978, apenas tres años después de la muerte de Franco, cuando se despenalizó la homosexualidad. Luego, en 2005, España se convirtió en el tercer país del mundo en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo. Sin embargo, las personas mayores de la comunidad LGTBIQ+ no han visto beneficios significativos de estos avances legales, razón por la cual Armenteros, quien creó la Fundación 26 de Diciembre, está abriendo la primera residencia para personas mayores LGTBIQ+ en España.

La residencia tiene como objetivo ofrecer un entorno seguro y libre de discriminación para las personas mayores LGTBIQ+ que fueron privadas de derechos matrimoniales y pensiones públicas, ya que no pudieron contribuir al sistema de seguridad social durante el régimen de Franco.⁠

Si bien está diseñada para pensionistas LGTBIQ+, Armenteros enfatiza que la residencia está abierta a todas las personas, independientemente de su orientación sexual.

Según Armenteros, las personas LGTBIQ+ pueden ingresar en una residencia convencional, sin embargo, “para muchos sería volver a entrar en el armario. El personal no está preparado para la diversidad”.

Programada para abrir el 28 de junio, coincidiendo con el Día del Orgullo LGTBIQ+, la residencia estará ubicada en el distrito de Villaverde Alto, en Madrid.